Efectivamente se ha montado la de Troya, como ya comenté y auguré en la editorial de Actualidad Fallera de este mes de junio. Lo que no entiendo es que haya cogido por sorpresa al autor del plagio y al Gremio de Artistas Falleros, del que es secretario.
Hay que tener poca vergüenza para hacer lo que el Sr. Bartolomé ha hecho, por tres razones fundamentales: por profesional, por ocupar el puesto que ocupa en el Gremio y por ser uno de los ideólogos del “pase de cepillo” que quieren hacer por los derechos de propiedad intelectual.
Encima el protagonista de esta polémica tiene la osadía de exigirle a Ángel Romero, responsable de Cendra Digital, que quite el boceto de la hoguera Campoamor Norte-Plaza de América, en el que se copia torpemente el diseño de Ramón Pla para Na Jordana en el año 2013, y que no vuelva a publicar ningún boceto suyo. ¿Y las fallas y hogueras que planta este señor saben ya que no saldrán nunca en la página web en cuestión?
Según las declaraciones subrayadas en Levante EMV por Moisés Domínguez, hay que tener poca vergüenza al tan sólo pedir disculpas por el plagio, zanjando el tema como si esto hubieses sido una chiquillada de unos niños de primaria. Pues no, el plagio que yo sepa es algo muy gordo y de consecuencias graves si el autor denuncia.
Hay que tener poquísima vergüenza por la última frase de las declaraciones de José Bartolomé, en las que contraataca diciendo “aun lamentándolo nuevamente, miren todas, todas, las fallas hasta las de arriba y si quieren luego que hablen”. Qué falta de elegancia. Pero por otra parte, con esa afirmación no hace sino darnos la razón en el tema de los derechos de autor, que lo que han estado y quieren seguir haciendo es cobrar por muchas obras que son plagios o corta y pega, siendo conocedores del hecho.
Solamente con esta afirmación del que es secretario general del Gremio de Artistas Falleros de Valencia, sería más que suficiente para que la directiva de la institución de la que forma parte actúe en consecuencia, en uno u otro sentido. O que callen o que exijan lo que deban a su compañero. Y eso también va por los artistas falleros que lo votaron en su día.
Hablando propiamente del implicado en este asunto, de sus declaraciones y forma de actuar se desprende una falta de profesionalidad más que evidente. Y si eso no tiene nunca excusa, menos si es uno de los cargos más importantes del colectivo que agrupa a los artistas falleros de Valencia.
El Gremio ha hablado y ha dicho lo que piensa. “Queremos manifestar nuestro enérgico rechazo hacia este tipo de situaciones tan desafortunadas e incómodas para todos. Desde la Directiva se le ha transmitido al Sr. Bartolomé nuestra disconformidad y se le ha solicitado que aclare lo sucedido”.
Y cuando lo aclare, ¿qué pasará? ¿Tomará medidas el Gremio o lo hará el propio implicado? Estamos a la espera de noticias.