El que la fiesta de las Fallas sea declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO es tarea de todos sus integrantes, por lo que todas las acciones que se realicen para conseguir tal objetivo son fundamentales y necesarias.
La JCF ha organizado unas jornadas para difundir y contar todo lo que conlleva el proceso de la candidatura, un proceso vivo que continuará en el tiempo independiente se consiga o no, es decir, auque se consiga el título se tendrá que seguir trabajando y difundiendo la fiesta para mantenerla viva.
Por todos es sabido y conocido el papel, entre otros, mediático que tienen nuestras Falleras Mayores de Valencia y sus Cortes de Honor. Es por ello que ellas han sido las primeras en conocer aspectos importantísimos de nuestra fiesta, su historia, sus cambios y su adaptación a los tiempos. Ellas son las más susceptibles de ser preguntadas y son una parte muy importante de nuestra fiesta y de su imagen.
Siempre he dicho que las fallas son fiel reflejo de la sociedad, una sociedad cambiante al igual que nuestra querida fiesta. Es por ello que la iniciativa de ofrecer conocimientos participando en estas charlas divulgativas me parece un gran acierto y una labor más que destacada de l’Associació d’Estudis Fallers. Se ha dicho que no dejan de ser charlas de adoctrinamiento, ¡menuda barbaridad! Ni que nuestras representantes no tuvieran criterio propio para asimilar y formarse su propia opinión sobre cualquier aspecto tanto de nuestra fiesta como de su día a día.
Creo que este tipo de iniciativas son positivas y enriquecedoras, y deben de extenderse a todos los sectores de la fiesta. Para saber lo que está ocurriendo en el presente es necesario conocer el pasado.
Cambiando de tema, hablemos ahora de aspectos de imagen e identidad corporativa de nuestra fiesta.
La verdad que no paramos, no hay respiro en lo que se refiere a carteles y logotipos para comunicar e identificar un determinado evento o institución. Hace unos días nos desayunamos con la nueva imagen de marca o identidad paraguas de las fiestas de Valencia, “Festes de València”, obra del ilustrador Carlos Corredera. Independientemente de criterios de gustos, siempre subjetivos, y una vez conocido el manual de identidad corporativa, esta imagen o “marca paraguas” falla en un aspecto fundamental, no transmite mensaje, no sabemos qué es. Hay que decir que el encargo de realizar un logotipo que identifique a las fiestas de la ciudad no es tarea fácil, por no decir casi imposible, por la idiosincrasia de las mismas y por el gran número de ellas, por lo que un encargo de este tipo, verdaderamente es un “caramelito envenenado”. Y es tan difícil que pocos de nosotros recordamos a cual sustituye, lo que significa que el anterior tampoco tuvo la repercusión debida.
Cuando se observa el desarrollo para llegar al producto final, la marca que todos conocemos, sí que se observa un trabajo impecable y adaptado al encargo del mismo, y te demuestra que se recoge muchas de las características y peculiaridades de nuestras fiestas, el problema es que tienes que ver el mismo para entender el resultado, es por ello que el mensaje no llega al consumidor final y de ahí la perplejidad de muchos de los comentarios.
Independientemente de todo ello, todo trabajo publicitario está a expensas de gustos y criterios subjetivos. Te puede gustar más o menos, pero desde mi punto de vista el desarrollo creativo de Carlos Corredera, para un servidor, es más que aceptable.