Llegó el mes de febrero y nuestra fiesta es protagonista en todos los rincones de la ciudad. En los últimos meses se ha hablado de todo menos de fallas, por lo que se agradecerá que en los próximos cincuenta días podamos hablar verdaderamente de lo que nos gusta, de la esencia de nuestra fiesta y de lo que sentimos, amamos y trabajamos por ello. Pero recuerden, sólo serán cincuenta días, ya que por desgracia existen muchos intereses por todas las partes y ninguna de ellas está dispuesta a dar su brazo a torcer. Y es que, en ocasiones, se debería tener en cuenta y creer a las personas de nuestra fiesta que su único interés es lo mejor para la misma, sin más.
Y digo que sólo serán dos meses porque las baterías se están cargando de nuevo y los cañones apuntando, entre otros objetivos, a la falla municipal infantil obra de Anna Ruiz y Giovanni Nardín.
Conocemos poco del proyecto infantil, y ya no sé si es porque los propios artistas quieren descubrir el mismo a cuentagotas, quieren controlar el flujo de información creando un blog e insertando las imágenes que ellos desean o verdaderamente existe un temor por parte de los responsables de que las ‘collejas’ lleguen antes de tiempo. La realidad es que a día de hoy se tiene una información sesgada y que sólo origina un cierto morbo, incrementando las especulaciones sobre el proyecto. Y esto no es bueno. Pero esperaremos a ver la falla plantada, e independientemente del agrado o no de la misma, se respetará el trabajo de los artistas.
Lo que sí que ya podemos ver es la Exposición del Ninot, por segundo año consecutivo instalada a la Ciudad de las Artes y las Ciencias, huyendo de la tan criticada carpa que en los últimos años albergaba la muestra. Y cabe recordar este aspecto, porque la falta de memoria es un mal en nuestra fiesta, y en esta cuestión se ha avanzado y mucho. De nuevo veremos un adelanto de lo que se plantará en nuestras plazas, y dos de las figuras pasarán a la historia de las Fallas y al Museu Faller, ya saben ustedes, no las mejores, pero si las elegidas por todos los visitantes, que con su voto, decidirán los ‘ninots’ que se salven del fuego.
Y son días de tener noticias y adelantarse en lo que se puede para saber qué es lo que veremos plantado en el mes de marzo. Es siempre la previa a esa ‘ruta de plásticos’ que hace incrementar tanto las ganas como el morbo de quien se alzará con los máximos galardones este año. La verdad es que un año más vamos a tener una competición fantástica en diferentes secciones. Por lo que respecta a la sección Especial, existen muchas ganas de ver el trabajo de Pere Baenas para Convento Jerusalén, el de Julio Monterrubio para L’Antiga de Campanar o el trabajo del debutante en la sección, Paco Torres, para la Plaza del Pilar, sin olvidar, claro está, al actual campeón, Carlos Carsí para la falla Cuba-Literato Azorín. Una categoría vibrante que hará las delicias de muchos. Por lo tanto, queridos lectores, es momento de disfrutar y hablar de Fallas.