En las siguientes líneas conoceremos a dos falleras mayores que han vivido un reinado de ensueño con un nexo en común: ambas confiaron en el saber hacer de Eduardo Puertes e Inmaculada Calap.

Laura Ynat López fue la fallera mayor 2023 de Santa María Micaela-Martín el Humano. Decir Ynat y López en Micaela es hablar de tradición, de falleros de poso y de amor por la fiesta del fuego. Pepe, Fina, Noelia y Laura sienten las Fallas y son tema de conversación a diario en casa.

Laura, como hiciera en su año de fallera mayor su hermana Noelia, optó por no llevar banda como máxima representante. «El importe de la banda lo doné a MAIDES». Para ella, «al igual que los hombres en su momento llevaban el fajín de presidente y ya no lo llevan, nosotras, para ser falleras mayores y representar a nuestra comisión tampoco lo necesitamos. Represento a mi comisión con el mismo orgullo, lleve o no lleve banda».

Laura estuvo aconsejada para su indumentaria por Eduardo Puertes e Inmaculada Calap, con quienes la familia guarda gran amistad. «Estar junto a ellos era saber que estaba en las mejores manos. Estaba tranquila porque sabía que iban a hacer las cosas como nos gustaban, que respetan la indumentaria tradicional y que son profesionales».

El traje de la proclamación, del siglo XVIII, se realizó con un dibujo antiguo recuperado en tonalidad gris oscuro, con la pala y los zapatos en color caldera. El traje de la presentación fue un modelo confeccionado con el dibujo Santa Teresa, con manga de farol y zapatos tradicionales con pompón, en color vicelayo, mezcla de blanco y verde.

Carla Sierra Ferrer fue la fallera mayor infantil 2023 de la comisión de la falla Ceramista Ros-José María Mortes Lerma. Tiene 14 años, estudia 3º de ESO en el IES de San Antonio de Benagéber, practica la equitación y le gusta viajar y estar con su familia.

«Ser fallera mayor infantil es un recuerdo que se queda para siempre», afirma Carla, que ha vivido un año especial e inolvidable como máxima representante de su comisión. Hay que señalar que Silvia, su madre, fue fallera mayor, y su hermano, Javier, en 2016, presidente infantil.

La familia guarda una relación muy especial con Eduardo e Inmaculada desde hace treinta años. «La verdad es que nos lo ponen todo muy fácil», nos revela Silvia. «Como ya nos conocen tanto, saben nuestros gustos, acertamos en todo. Tenemos muy buena conexión».

Para este año, Carla vistió tres trajes de Eugenia Puertes, además de un traje de su madre como fallera mayor que se arregló para ella; un modelo de tonalidad azul con flores en dorado.

El traje de la exaltación, en color toffee, buscando la originalidad de ese tono, se confeccionó al estilo del siglo XIX. Otro de los trajes, confeccionado al estilo del siglo XVIII, blanco con flores en azul, es por el que Carla confiesa que siente predilección. Un traje de color vainilla con tonos rosas completa el conjunto.

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