La primera en hacer acto de presencia ayer fue la falla oficial, obra de Fran Santonja, que se estrena en la plaza tras el paso en años anteriores de Joaquín Rubio. Este además plantó la de San Francisco de Sales, que no llegó a su emplazamiento tras pasadas las doce y media de la noche. Pero a los comisionados de la falla no les importó ya que horas antes habían recibido una muy buena noticia, les había tocado a lotería de la falla infantil, y todos cuanto habían participado llevaban unos cuantos miles de euros en el bolsillo.
La falla las Trescientas también fue madrugadora y la figura de Pedrito Rico lucía desde bien pronto en la encrucijada de calles ante la admiración de los vecinos.
Joaquín Rubio también finalizó su trabajo en Huerta Nueva a primeras horas de la tarde, aunque un pequeño chaparrón provocó que rápidamente tuvieras que cubrir algunas de las Figueras para evitar que estas sufrieran desperfectos.
Finalmente el equipo de Actualidad Fallera desplazado hasta Elda acabó su ronda en la falla El Trinquete, donde pudo presenciar, en primera persona, el levantamiento al tombe de el enorme espantapájaros que remata el monumento fallero.
Más tarde se degustó las tradicionales migas.