La climatología con la que se desperezaba la tarde de un intenso domigo 28 de febrero hacía prever lo que más tarde se confirmaría. Cerca de 60.000 falleros, según fuentes oficiales, han acudido en masa a la Crida, y las inmediaciones de la Torres de Serranos rebosaban de estandartes, polares, blusones y algún fallero ataviado con el traje de valenciano, desde primera hora.
El escenario que todo aquel que acudió a la cita se encontró fue el de una fiesta con todas las de la ley. Y es que de completo éxito hay que tildar la iniciatia llevada a cabo este año por la organización del evento, y que se basó en la contratación de la Orquesta Montecarlo para amenizar la espera hasta la Crida. Los asistentes disfrutaron con el adecuado repertorio del conjunto, que cuenta con las voces de Eduard Forés, Albert Andrés, Sara Santos y Belén Alarcón, los que supieron entretener a los falleros hasta el momento de la verdad.
La banda, capitaneada por Eduard Forés, haría saltar literalmente a todos los presentes, avivando una de las Cridas más multitudinarias de los últimos años.
Capítulo aparte merece la decoración de las Torres de Serranos. La iniciativa altruista de Interflora dejó indiferente a muchos de los asistentes, ya que los paneles florales con flors de anturium rojas quedaron excesivamente pobres al lado de las enormes torres. El encargado de esta decoración ha sido el diseñador belga Tomas De Bruyne.
Un video sobre las Fallas de Valencia sirvió de preámbulo a la aparición en la tribuna de la cortes de honor y las Falleras Mayores de Valencia del año 2010, acompañadas por la alcaldesa, Rita Barberá, y el concejal de Fiestas y Cultura Popular, Félix Crespo, así como los ediles del consistorio valenciano. Hay que destacar que el acto contó con la presencia del vicepresidente del Consell, Juan Cotino.
La alcaldesa Barberá entregó las llaves de la ciudad a Mª Pilar Giménez, haciendo alusión antes, en la introducción, "a la lluna de Valéncia, a una preciosa nit de lluna plena".
La Fallera Mayor, visiblemente emocionada, al igual que la corte, realizó su Crida a la fiesta acompañada por los aplausos de los falleros. "Valencians, falleres i fallers, gent de tot el món, que esta clau òbriga València, les falles i un món millor.Comencen les falles, comença la major festa del món".
"Vingau tots, vos espera en cada carrer una obra d'art, un pasacarrer sempre acompanyat de la seua banda de música, el sò de les traques,
les flors que en tota devoció li duguem a la nostra mare, el blau del cel s'omplirà de foc, tot s'omplirà d'alegria i color, tot és un gran monument per a València, el millor monument convertit en festa, el treball de tot un any: les falles!"
"Valencians, tots a una veu, ja estan ací, ja es senten. Vingau en mi poble valencià, junt a les Corts d'Honor i la Fallera Major Infantil, vingau i participeu en la millor festa, la millor per sempre".
Alçeu la veu, feu tremolar les torres, que s'entere tot el món, que en estos moments comença la millor festa del món. Valencians, fallers, alçeu els vostres estandarts i crideu en mi, ¡¡¡Vixca València!!! ¡¡¡Vixquen les Falles!!!".
Finalizada la Crida, y tras la interpretación por parte de la Banda Municipal de Valencia del himno de la Comunitat Valenciana, y del himno de España, la Pirotecnia Valenciana de Llanera de Ranes pondría el colofón del acto con un entretenido castillo de fuegos artificiales.
Como es tradición, la comitiva enfilaría la calle Caballeros hasta alcanzar la Real Basílica, donde las Falleras Mayores de Valencia y sus Cortes de Honor realizaron una ofrenda floral a los pies de la Mare de Déu dels Desamparats.
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