Desde primeras horas de la tarde los falleros se trasladaban a las inmediaciones de las Torres de Serranos, donde a las 18:30 horas la Orquesta Montecarlo, por segundo año, levantaba el telón de los actos vespertinos del día de la Crida. Y el ambiente de gran fiesta llenó todas las Alameditas de Serranos y las calles adyacentes.
La música y la diversión de la formación capitaneada por el televisivo Eduard Forés, y que ofreció un amplísimo repertorio para todos los gustos y edades. Mientras pasaban los minutos, la zona se hacia más impracticable y el lleno hasta la bandera ofrecía una imagen espectacular. Precisamente la imagen que a las 20 horas verían Laura Caballero, Carmen Monzonís y sus Cortes de Honor.
A las 19:30 horas llegaban las máximas representantes de la fiesta acompañadas de la cúpula de la Junta Central Fallera y el presidente de la misma, el concejal Félix Crespo, además de los miembros de la corporación municipal. A continuación llegaba la alcadesa, Rita Barberá, que saludaba a las Falleras Mayores de Valencia.
Laura y Carmen lucieron sendos espolines tejidos por la firma Rafael Catalá. Desde el año 1999 no se daba esta coincidencia.
Laura Caballero lució el espolín denominado “Árabe”, de color “Heliodoro verde”, el tono grisáceo de sus ojos. Laura quedó enamorada de ese modelo en el año 1998 cuando formó parte de la Corte de Honor de la Fallera Mayor Infantil de Valencia. Fue la Fallera Mayor de ese año, Susana Remohí, quien lo lució para el día de su Exaltación y desde ese momento, Laura soñó con poder lucir ese dibujo algún día.
El traje ha sido confeccionado por Amparo Fabra siguiendo los patrones del siglo XVIII. El aderezo, de Art Antic, y las peinetas de Flor d´Aigua. Todo ello regalo de sus padres.
Carmen Monzonís visitó un espolín “Carpio” en color “Flor Erythrina” (coral). Se trata de un espolín del archivo histórico de Rafael Catalá que se caracteriza por una gran palma central que engloba un conjunto de flores y ramas.
Y llegó el momento de la verdad. Una vez realizada la clásica introducción a cargo de la alcaldesa, y entregadas las llaves de la ciudad, Laura Caballero dirigió sus palabras al mundo entero, las cuales les ofrecemos en el siguiente video.
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Con la interpretación de los himnos regional y nacional, y el disparo de un castillo de fuegos artificiales a cargo de Pirotecnia Valenciana, finalizó el acto de la Crida propiamente dicho. Mientras, las Falleras Mayores de Valencia bajaban del estrado y atendían a los medios de comunicación entre visibles muestras de emoción y lágrimas en los ojos.
La comitiva se desplazó finalmente a la Basílica de la Mare de Déu dels Desamparats, en donde las representantes de la fiesta realizaron una ofrenda floral.
