Cuando uno lleva tantos años trabajando en el mismo sitio, acaba conociendo a la perfección los entresijos y recovecos del trabajo que desarrolla y, sobretodo, del lugar en el que lo hace. Eso le ocurría a Enrique Narbón, miembro de la Junta Central Fallera desde hace 37 años y fallero de la comisión Cervantes -Padre Jofre.
El pasado día 23 de abril de 2005, Enrique recibió un merecido homenaje en la fiesta de fin de ejercicio del polideportivo K-7. Allí, el Presidente Félix Crespo le entregó, en presencia de las Falleras Mayores de Valencia y de todos los miembros de la casa, la mención de honor por sus años de dedicación a la fiesta.
Fallero desde que nació, hace ya 71 años, entró en la Junta Central Fallera en el año 1970. Fue José Picó, el entonces secretario, quien le ofreció la posibilidad de trabajar en secretaría. Enrique había desempeñado diversos cargos en esta delegación, como ser vice-secretario y tesorero, además de haber formado parte de la Delegación de Recompensas trabajando codo con codo con quien ahora es el secretario general, Vicente Fayos.
Entre las Fallas y el Valencia C.F. se dividían sus amores; el equipo che eran protagonistas de muchas de sus conversaciones con los clientes habituales de su estanco e imágenes de los jugadores y del escudo presiden el negocio de este fallero de pro.
Enrique siempre afirmaba que lo que más le había gustado de su paso por la Junta Central Fallera era el trato con la gente. Lo demostraba en sus gestos y en su sonrisa cuando saludaba amablemente a la gente. Sin duda, su compañeros le echaremos mucho de menos.
A sus familiares y amigos queremos hacerles llegar nuestro más sentido pésame de parte de todos los miembros de la Junta Central Fallera y del colectivo fallero en general. La misa por su alma tendrá lugar el sábado 15 de diciembre a las 16 horas en la capilla del Tanatorio Municipal de Valencia