El sábado 17 de enero se celebraron definitivamente las Calderes de Sant Antoni aplazadas de al semana anterior por el mal tiempo. La cocción arrancó a las 9 de la mañana y a las 13,30h. tuvo lugar el reparto de la comida popular de "arròs caldòs amb fesols i naps" siguiendo la tradición centenaria de dar de comer a los pobres en época de invierno. El portavoz de la entidad festiva Joan Orquín destacó que este año hubo una caldera más que el anterior, en total 19 y que se dio de comer a más de tres mil personas.
Los organizadores se encargaron del montaje de las mesas, cubiertos y bebidas además del reparto de la comida. A lo largo de la semana se preparaon los ingredientes que aseguraron eran " productos de primera calidad". Paralelamente a lo largo de toda la jornada tuvo lugar en la Plaça de Sant Roc el tradicional Porrat con productos sectos, dulces, golosinas, etc. Según la edil de fiestas "se ha celebrado ininterrumpidamente".
Antes de la comida popular tuvo lugar definitivamente la actuación de Pep Gimeno "Butifarra" en el marco de los actos que se han programado conjuntamente con la nueva asociación de vecinos Raval-Gerrería en la Plaça de Ganguis. Por la tarde hubo lugar un pasacalle con el Grup de Danses Raval i Vila por las calles Sant Vicent, Mare de Déu del Rebollet, Sant Blai, La Font, Ermita, Sant Pere, Fateres, Cistellers, Ermita y Ganguis.
Después, tras una merienda popular a todos los asistentes a base de chocolate y dulces , actuó la Federació de Muixerangues del País Valencià, entre ellas también un grupo procedentes del Ball dels Locos de l'Ollería previstos inicialmente. Mas tarde hubo fin de fiestas con reparto de mistela y despedida.
El domingo día 18 en colaboración de la asociación de festeros de Sant Antoni se celebró a las 11 horas la tradicional misa en honor al santo en la Ermita. Al finalizar la misa hubo el tradicional desfile con la bendición de los animales por las calles de la barriada y reparto del "pa beneït" por parte de los festeros a todos los asistentes.