“No tengo trabajo. He pasado al olvido. Nadie me ha llamado”. Así nos comunica el artista fallero José Manuel Alares Sales la puesta en venta de su taller. Alares afirma que, debido a la falta de ofertas de trabajo, tiene que cerrar la persiana y vender el obrador en el que el artista realizaba sus fallas infantiles.
De esta forma, la crisis y los cambios en las comisiones falleras producidos por el aborrecible concurso de bocetos se han cebado con uno de los artistas de referencia dentro del mundo de las fallas infantiles. Alares comenzaba su trayectoria en el mundo de las fallas infantiles a principios de los años setenta. En el año 1978 debutaba en la sección Especial Infantil de la mano de la falla Regne de Valéncia-Duc de Calàbria. Las comisiones de la Plaza del Pilar, Castellón-Segorbe, Convento Jerusalén-Matemático Marzal, Obispo Amigó-Cuenca y Serranos-Plaza de los Fueros, entre otras, han visto en sus plazas las obras de un artista que en su momento rompió los cánones inmovilistas establecidos en la concepción de fallas infantiles, y que hoy en día sigue siendo un referente.
Dentro de su trayectoria, compuesta por más de un centenar de fallas infantiles, habría que recordar los monumentos que en los años noventa plantó para L´Antiga de Campanar, donde logró el segundo premio y el primero de ingenio y gracia en el año 1993.
En estos momentos Alares se dispone a echar el cierre. Esperemos que no sea un adiós definitivo.
Fotos: Julio Fontán
