Mucho cuero, compañerismo y espíritu Harley se ha podido ver este fin de semana en Valencia. Y, por encima de todo, destacaban las protagonistas, las cerca de 150 motos de la mítica marca americana orgullosamente exhibidas por sus dueños. Con ellas han realizado esta mañana una espectacular ronda por las principales calles de la ciudad que les ha llevado desde el Puerto hasta la Plaza del Ayuntamiento.
Era la VII Concentración Murciélagos, organizada por el Valencia Hog Chapter, y que desde hace dos años cuenta con la colaboración de la Regidoria de Festes i Cultura Popular, que incluye alguno de sus actos dentro de la programación de la Feria de Julio. Como explica el sudbdirector del club, Miguel Julián, “este apoyo del Ayuntamiento de Valencia ha sido muy importante porque antes hacíamos una concentración muy pequeñita y este año tenemos cerca de 150 participantes”.
La colaboración del consistorio municipal ha traído al cap i casal estas jornadas que antes se realizaban en Cheste. Este fin de semana había gente llegada de todos los rincones de España. “Han venido de Madrid, Asturias, Alicante, Castellón, Mallorca… Los que vienen un año acaban encantados y al siguiente repiten trayéndose a más gente”, explicaba Julián.
Estas visitas son recíprocas, ya que los integrantes del Valencia Hog Chapter, además de hacer una salida mensual con sus motos, participan en las concentraciones organizadas por los clubes de otras ciudades. “Somos una gran familia –cuenta Miguel Julián-, prácticamente nos conocemos todos. Somos como una hermandad. La verdad es que el espíritu Harley es algo que pocas cosas pueden crear”.
El espíritu Harley y la idiosincrasia de sus dueños. En toda concentración que se precie es imposible que falte el cuero, las banderas, los parches, las gorras y el rock. El grupo Thunderstock fue el encargado de animar la velada con sus versiones de míticos grupos como AC/DC, Guns and Roses o Bon Jovi.
Y toda esta logística ha llenado las calles del cap i casal, donde la gente aplaudía y aclamaba este desfile de banderas. Una vez en la Plaza del Ayuntamiento la foto de familia, en la que ha habido un recuerdo para la selección española en forma de cánticos, ha servido para que esta gran familia se despidiera hasta la próxima concentración.
