Garín es una empresa con solera. Viene de una saga de tejedores de seda que en su momento fueron artesanos con telar en casa y en 1820 dieron el salto a crear una empresa que hasta hoy en día ha pasado de generación en generación.
En los archivos del Colegio del Arte Mayor de la Seda figura D. Mariano Garín Aguilar como maestro sedero en 1824 y fue él quien a sus 20 años arriesgo y decidió emprender el camino que nos ha traído un pedazo de historia a nuestros días.
A través del tiempo, la empresa se ha impregnado de una cultura que hoy continua viva entre las paredes que encierran tanta historia, ha conservado su saber hacer, ha cosechado premios y halagos y en sus archivos se pueden encontrar cosas curiosas, como las medallas de premios de exposiciones internacionales o los permisos del Vaticano para la utilización del sello papal.
En las fotos del exterior del Colegio nos encontramos con las hermanas Marta y Carmen, y su prima Elena de la Cuadra. Elena y Marta lucen la joya y buque insignia de la casa Garín, un Valencia. Elena luce un Valencia gris que fue encargado por su abuela para su madre, María, mientras que Marta luce un Valencia blanco que fue confeccionado para Mª Amparo Ribes Garín con las flores principales en azul (el color tradicionalmente más escogido de este diseño).
El traje que luce Carmen también tiene su historia particular. Se confeccionó para Elena de la Cuadra, para lucirlo el día de la boda de un catalán con una madrileña amigos de la familia que contrajeron matrimonio en los jardines de la casa que tienen en Santa Bárbara.
En estas fotos vemos a parte de la generación más joven de la familia que conserva trajes tejidos con esmero en los telares de Garín.
Podemos ver a los hermanos Aitana Mar y Arnau de la Cuadra en las escaleras del colegio.
Aitana luce un Espigas de Monserrat color oro que su abuela encargó el día que nació. Su hermana Mar lleva un Reina verde mar precioso que también está en la familia desde hace muchos años. Arnau pronto lucirá otro espolín, pero hasta que llegue el momento de confeccionarlo luce un traje de Saraguell también encargado por su abuela Mª Teresa, gran valedora de las telas de Garín.
