La Llar del Fil nace el año 1957. Esta firma, a largo de tres generaciones, “ha ganado la fidelidad de sus clientes gracias a la increíble calidad de nuestros productos”, afirman sus responsables. “Contamos con un largo camino en el que la experiencia, el saber hacer y la apuesta por la calidad han marcado todos nuestros pasos”.
A lo largo de su historia, La Llar del Fil ha sabido innovar y mejorar de año en año sus productos, gracias también a conocimientos técnicos que han permitido crear nuevos estilos, tanto en enaguas como en cancanes, consiguiendo que el producto realce el dibujo de las faldas de valenciana. “Nuestros nuevos estilos están enfocados para reducir el peso de las telas dando un volumen elegante y natural”, subrayan.
“Ahora, con todo el esfuerzo y dedicación a nuestro trabajo somos proveedores de indumentaristas regionales y tiendas de moda de toda España, adaptándonos a las exigencias como las terminaciones y calidad de nuestros clientes”.
La Llar del Fil presenta en estas páginas su nuevo modelo de cancán, “el modelo Felisa, bautizado así por ser el nombre de mi madre -cuenta Salvador Fonseca-. Gracias a ella nació esta empresa y fue quien nos transmitió la experiencia y los valores que tenemos hoy en día en La Llar del Fil. Este modelo ha sido elegido por las indumentaristas oficiales de las Falleras Mayores de Valencia y sus respectivas Cortes de Honor por su vuelo natural, y a la vez por el refuerzo necesario para aguantar el peso de las telas durante varios años”.
Fotos: Aidoru Design