Carro vacío

AlejandroUna vez pasado el periodo estival, de nuevo la maquinaria fallera se pone en marcha. Llega el mes de septiembre y, sin duda, las falleras son las protagonistas. Cuando lean este artículo ya conocerán los nombres de las 13 señoritas y las 13 niñas que pasarán a la última fase del proceso de elección de nuestras máximas representantes. A ellas las conoceremos el próximo 16 de octubre en el acto del nombramiento, más conocido por todos nosotros como ‘la llamada’. Dos nombres escribirán de nuevo una página de la historia de nuestra fiesta y aquí estaremos para contárselo. Hasta la fecha, solamente desearles mucha suerte a todas ellas.

Y mientras tanto, como comentaba, la maquinaria se pone en marcha, y también lo hace en el máximo ente fallero, JCF. Una nueva directiva que como siempre en sus inicios ilusionada trabajará para que nuestra fiesta de nuevo, sea ejemplo de un trabajo excepcional gracias a los falleras y falleras. Nuevas caras en esta directiva que esperemos trabajen incansablemente por y para nuestra fiesta, en pro del beneficio general, que no particular, y con solo miras de velar por lo que tanto queremos y apreciamos. Espero y deseo que el entusiasmo inicial perdure durante todo el mandato y que no ocurra lo de los últimos años.

Llega el mes de octubre, un mes donde la falla es la auténtica protagonista, donde nuestros artistas nos mostrarán los proyectos que lucirán en nuestras calles el próximo mes de marzo. Antes de verano se habló y mucho de medidas y volúmenes. En este ejercicio nos daremos cuenta de su materialización o no, veremos si finalmente hay un acuerdo para poder salvar el oficio y la economía de los talleres falleros, veremos si finalmente se lleva a cabo lo de ‘la unión hace la fuerza’ y vamos todos a una o no. Sin duda nos encontraremos con una nueva situación que esperemos, como mínimo, alivie a quien verdaderamente tiene problemas. Esperemos que todos y todas, desde nuestros sectores, creamos verdaderamente en el #volemfalla y no se quede en nada.

De nuevo finalizo una columna con un recordatorio triste y doloroso, y por desgracia no es la primera vez en este ejercicio. Quiero enviar desde estas líneas un abrazo enorme, gigante a la familia de los ‘bergones’ y a la gran familia del Botànic por la gran pérdida que hemos sufrido este verano de una gran persona y un enorme fallero. Todos nos quedamos sin palabras cuando nos enteramos de que Vicen, nuestro querido Vicen, nos dejaba este verano. Un dolor muy inmenso para toda su comisión, pero también para la gran familia fallera de la ciudad. Una persona trabajadora, amante de nuestra fiesta, de su gente. Una persona que siempre recordaremos por su amabilidad, su responsabilidad con todo lo que contenía la palabra falla. Una persona querida y que siempre te hacía sentir como en casa cuando cruzabas la puerta del casal. De verdad que cuesta mucho escribir estas líneas, pero el mundo fallero siempre estará en deuda contigo. Descansa en paz amigo, te echaremos mucho de menos. DEP.

PunxesEscolta que dic jo que… Ya puestos, ¿por qué no avanzamos en la dinámica de poner límites o topes? Será conveniente, ¿no? Por ejemplo, pongamos límite a los llibrets. Los llibrets son otra de las grandes apuestas económicas de muchas comisiones, en algunos casos mayor incluso que la propia falla. Propongo un límite: grosor máximo de los llibrets a concurso: un centímetro. Total, leerlos tampoco los va a leer nadie, como hasta ahora. Así menos gasto y se puede dedicar a la falla, ¿que no? Seguro que algunos aplauden la iniciativa, ya te digo. Eso sí, si quieren editarlo en tamaño tabloide, ¡adelante!    

Xe! Que estic inspirat!  Seguimos poniendo topes. Máximo de repeticiones del pasodoble ‘València’ en la ofrenda, DOS (El límite de músicos por banda lo han puesto las circunstancias económicas) Pirotecnia: máximo de carcasas y truenos por mascletà de falla: cuarenta. Iluminación: máximo de arcos: cinco por demarcación. Así todos jugamos con las mismas armas, ¿que no? A qui poc gasta, poc li basta.

Va de bó, cavallers! Anem de gala. Este último límite, sí o sí. Duración máxima de los actos organizados por JCF: 90 minutos. No es necesario estar cuatro horas poniendo a prueba la capacidad de transpiración de los asistentes, cuando lo único que les interesa a estos son treinta de esos minutos. Entiéndase la gala de elección de la Fonteta 2020. Al pas que van, caldrà pagar per badallar.

No hi ha mentida més grosa que una veritat a mitges. Algunos dicen que el acto de la Fonteta se hace para l@s faller@s. ¡Falso! Si así fuera, lo más importante sería su presencia y se habilitarían los accesos necesarios para su entrada, sin tener que hacer colas interminables para poder acceder al recinto, incluso con el ‘espectáculo’ comenzado. No es de recibo que las gradas VIP y PRIVILEGY (sí, esa a la que vamos todos los ‘afortunados amiguetes’) estén llenas media hora antes para demostrar lo contentos que estamos de conocernos. De diners i de veritats, deixa-ho per la meitat.

Amb diners torrons, i amb dacsa esclafitons. Es, sin duda, la mejor explicación de lo sucedido en la Fonteta el dia 21 de septiembre. Pero por si alguien aún no lo entiende, ahí va otro: Bo i barat, mai s’han casat. Alguien tendrá que estudiarse las ‘virtudes’ de sacar a concurso todos los contratos, sobre todo si la motivación final de la elección de las ofertas solo es el precio. Así pasa lo que pasa, que nadie puede dar duros a cuatro pesetas. Y si los da, son falsos. Una iluminación penosa, hecha sin pensar en la retrasmisión televisiva, y una sonorización vergonzosa. A pocs diners, poca música.

I per acabar van arrancar els ais… ¿Será la formación futbolística lo que llevó al nuevo secretario general a nombrar a las elegidas como si fuera el ‘speaker’ de un campo de futbol? Uf! Va baladrejar més que la mar de llevant. Cada u parla com és.